Poner en juicio moral la opinión del otro es un error

Poner en juicio moral la opinión del otro es un error 

Aclarar que no soy un moralista más de internet, de hecho eso es lo que quiero -por decirlo de alguna forma- reflexionar. Quiero con esto entrar a un tema muy controversial como lo es la moral de internet o, denominado de otra forma, la moral del común social y como esta es aplicada por nosotros y sobre nosotros.

Estoy claro que hay personas que se sienten en el derecho de criticar a los demas en algún punto donde sus ideas son distintas y se sienten con el derecho de recriminar o juzgar aquellos puntos de vista que no estan a la misma altura que los de ellos. Son capaces de, como se dice en la actualidad, funar o cancelar a aquellos que presentan una visión crítica del tema que sea. A mi parecer esto deriva de la cantidad de extremos y la alta adoctrinación de las personas en sustitución de dejar a libre elección pensar lo que quieran.

Hasta este punto muchos "extremistas morales" ya podrían estar cancelandome, por el simple hecho de mostrarme crítico a su modo de actuación. Traigo un ejemplo de lo quiero exponer. En Chile la situación política está complicada y es algo que nos compete a todos pero lo visto ultimamente debería dar vergüenza. En este contexto de aprobar o rechazar un texto constitucional nuevo para Chile, muchos abogados y constitucionalistas salieron diciendo cuales eran los problemas de la propuesta de constitución hecha por la convención constitucional y de diferentes lados que no estaban de acuerdo con ellos les pasaron por encima, los trataron de mentirosos e intentaron cancelarlos a todos con la ciudadanía como mentirosos. Sin embargo hace no pocas semanas las mismas personas que trataban de mentirosos a todos ellos que establecian críticas -que a mi parecer estaban correctamente fundadas- presentaron un acuerdo para modificar aquellos puntos que en su momento criticaron y se catalogaron como mentiras, todo esto en contexto de campaña por el apruebo. 

Ahí es donde caemos en la moralidad falsa o el doble estandard, que ahora me veo perdiendo entonces acepto la crítica y prometo mejorarla, pero nadie se olvida que fueron esas mismas personas que negaron esos problemas y peor aún, deslegitimaron a las opiniones y análisis opuestos.

Otro punto que quiero tocar es la moral de la ciudadanía, en este contexto muchos critican a las personas que van por el rechazo tratandolas de inmorales e insensibles por preferir la constitución actual de Chile, que fue escrita en un contexto dictatorial donde se cometieron crímenes de lesa humanidad. Sin embargo no creo que esto sea un argumento firme o valido para invalidar una opinión, es decir y entiendo, las personas (no todas) que van por el rechazo no es porque prefieran la constitución de un dictador, es por el simple hecho de que no les convence la propuesta actual, no creemos (y sí, me incluyo)  que sea una constitución buena para Chile, pero si creemos en un proceso nuevo para crear otra constitución que adapte mejor a todos.

Ahí es donde yo veo un choque cognitivo, una discusión que debería ser desde la lógica, desde el sentido común, desde la razón humana, se ha convertido en una discusión que proviene desde el sentimiento, desde lo visceral y, como todos podemos pensar, nada bueno puede salir de ello. La razón de este sentimentalismo exacerbado a mi parecer es la inmediatez en la que se vive pero este tema podría dar para otro texto completo.

En síntesis, creo que debemos como sociedad ocupar un poco más la razón humana para poner en juicio la opinión de una persona, ser criticos del punto de vista propio y no ser impulsivo, que esto específicamente nos puede llevar a una contradicción.


Nos vemos quizás el próximo viernes con una nueva reflexión, recuerda que puedes sugerirme temas para hablar y exponer mi propia opinión de el.


- Opinador Compulsivo

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